Una llamarada
de hilos plateados surte de cada una de sus carcajadas, mientras la bruja exhibe
su sexo en una reunión aburrida entre aplausos y cuchicheos obesos...
Tomo un
dedo y lo pongo sobre una tecla para dejar palabras indelebles, que me liberen
de la narcolepsia de sus infinitos versos...
Una araña
que habla ingles y una cotorra que le responde en un remedo de su idioma en forma profundamente idota ininteligible...
Justo cuando
la cortina cae, mis pies saltan solos pero las cadenas que infestan la sala me
aturden con sus preguntas... dispersas.
Hay humo
gris por mi ventana, mis pensamientos se
cuecen, en un denso estofado con papas y zanahorias...Hoy soy comida de
procaces bocas y pésimos alientos...
Noc 2/10/2012
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