lunes, 24 de febrero de 2014



Me perdonaran todos por la extensión de estas líneas, sin embargo considero prudente plantear mi punto de vista sobre los recientes hechos y las diferentes matrices de opinión que se están  gestando para satanizar el derecho  a la libre protesta en Venezuela.

En primer lugar abro espacio para abogar por los estudiantes y otras personas quienes como yo se sienten profundamente indignadas con el proyecto de país en estos 15 años de gobierno y los hechos ficticios en materia económica que pretende vendernos el oficialismo como logros de la revolución. En mi humilde opinión, viniendo de abajo, como venezolano de a pie, la idea del modelo “socialista”, “populista” y “chafarotista” del chavismo-madurísmo atenta contra los principios fundamentales de libertad donde todos los hombres son libres, y son únicos y exclusivos propietarios de su existencia individual. Así mismo este sistema se opone a la naturaleza especifica de igualdad donde a pesar de las aparentes diferencias (económicas, sociales, culturales y religiosas)  todos compartimos el mismo objetivo de vivir bajo nuestro albedrio siendo sistemático este gobierno en hacer patentes esas diferencias aparentes y atentando manera contra la hermandad de nuestra nacionalidad aupando la polarización con un discurso clasista, discriminatorio, xenófobo y hasta racista típico de un sistema totalitario y verdaderamente fascista. Protestar es un derecho legitimo irrenunciable y el derecho a la legítima defensa ante el ataque cobarde y desproporcionado de los colectivos bolivarianos y la GN es justo y necesario. Las personas que fallecieron producto de estos actos represores no estaban armadas y suficientes pruebas existen para demostrarlo por lo cual me resulta absolutamente irrespetuoso y ofensivo cuando se pretende tildar de delincuentes, terroristas o agitadores de oficio a quienes simplemente alzan barricadas o lanzan piedras ante la agresión como protesta.  Por esto ante la intolerancia generada por el propio gobierno entre nuestros hermanos quedaría como anillo al dedo eso de que con la misma vara que mides serás medido.

Una vez aclarado lo anterior paso al segundo elemento de mi discusión, en donde muchas personas también opositoras cuestionan el curso de los hechos y comentan que lo que ocurre es una “cagada” argumentando que si Leopoldo, Ma. Corina o Capriles  desvirtuaron los objetivos de la oposición llevándonos a una alteración del orden publico ahora carente de objetivos, que no puedo entrar a mi urbanización, que no soporto el humo de las bombas, en este punto me pregunto yo, sin ser devoto de ninguna facción política,¿no creen que la política tal cual la conocemos  debe hacerse bajo un marco institucional donde existe independencia de poderes?  Pues si su respuesta es un “si” o “por supuesto” deben notar que hace mas de 10 años no existen independencia institucional el poder publico está absolutamente centralizado por lo cual aplica esto de  que estamos formalmente en una dictadura, por consiguiente si nos valemos de la expresión popular  de “dictadura no sale con votos” y del hecho de que el poder militar venezolano también esta embolsillado gracias a las regalías del chavismo, en mi humilde opinión las únicas vías para salir de esto son la resistencia y la desobediencia activa, por lo cual pienso que nuestros muchachos hacedores de barricadas están en el camino si bien no más idóneo, apuntando prudentemente a lo correcto. 

Relacionado directamente con lo anterior esta mi tercer y último punto tiene que ver con el hecho de la postura cómoda de quienes no vienen a la calle y critican la violencia como quien ve a dos bestias peleando en una jaula, discretamente desde un sillón, con una pipa, un buen trago y mucha moral superficial para  filosofar sobre la esquizofrenia de las masas y la supuesta idiotez colectiva que nos embarga, ante eso yo solo puedo decir que para saber el porqué de una reacción se debe ser parte de la acción original que desencadeno lo hechos, es muy fácil hablar sin recibir una patada antes de un guardia, una bomba o un insulto procaz de los colectivos bolivarianos. Es facilísimo hablar de tolerancia si directamente ninguno de los problemas de la hostilidad del gobierno te afecta directamente. Es aun mas sencillo llenar el twitter, o varios post de facebook con palabras de dialogo, consenso, paz y razón si jamás se vive en carne propia la agresión. Yo siempre he sido partidario del dialogo pero muchas veces (tal cual esta oportunidad) no puedo dejarme dar una bofetada sin responder de la misma manera ante el agresor, teniendo en cuenta que al hacer esto no me pondré en el mismo lugar de este por el simple hecho de que sería incapaz de generar violencia espontanea sin ninguna razón de peso para dejar abierta la válvula de las bajas pasiones. Es por esto que digo que si no consideras justa esta lucha independientemente de su naturaleza torpemente planeada es porque simplemente no te afectan tanto las barbaridades que ha implementado este gobierno y porque sencillamente en el interior de tu corazón hasta les tienes hasta un poquito de simpatía.

Saludos

Rafael D. García P.

lunes, 3 de febrero de 2014



Hay círculos que se cierran, otros nunca terminan de fraguar,
algunos con comodidad y alegría,
otros resultantes del envilecimiento y la amargura…

Este bucle en particular se pliega con indiferencia,
delicadamente cubierto, aun por la incertidumbre,
como una puerta abierta y los pies descalzos a la nada…

Así  yace suspendida, en un marco casi invisible,
sobre un espacio pintado de blanco,
Desorientada, apuntando hacia ningún lado…

Noc 2014