Te soñé negrita, con el cabello azul, brillante como el de una muñeca, llegando desde lejos el mejor día de nuestra mejor fiesta, que terminaba como tú misma vaticinaste… te soñé brillante y alegre, calurosa como siempre, me abrazaste y me dijiste mirándome a los ojos lo que ahora definitivamente sentías… te lloré como no lo había hecho antes, porque me perdía en la soledad en la que hacía tiempo no me encontraba, en donde las lentejuelas y los ojos de todos llenaban cada espacio haciendome parpadear, hasta finalmente perderte de vista sin poder ahora ser partícipe de tus alegrías…
18'10'12
Nocturnidae
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